Austria es un destino para los amantes de la música clásica. Compositores como Mozart, Schubert y Kreisler, entre otros, nacieron aquí. Pero esto no queda aquí, en cada calle de las principales ciudades de Austria hay un palacio, como muestra del poder de la realeza en el pasado. Además, aquí se desconecta de una manera diferente. En Austria no se va a un spa, en Austria se va a una cafetería.
Las mejores cosas que hacer en Austria
Una vuelta por el palacio del presidente
El Palacio Imperial de Hofburg es la residencia del presidente de la República de Austria, pero anteriormente habitaron parte de la realeza austriaca, puesto que se trata del palacio más grande de Viena, la capital de Austria. Dentro del palacio se encuentra el museo de Sissi y una gran variedad de salones imperiales.
La residencia de verano de la realeza
El Palacio de Schönbrunn era, en el pasado, la antigua residencia de verano de la realeza. Se puede realizar una visita guiada y descubrir todos los salones imperiales que hay en su interior. Cabe destacar que dentro de ella hay muchos recuerdos a la emperatriz Sissi. Además, hay que destacar los impresionantes jardines con los que cuenta este palacio.
Una de las salas más antiguas
El Kursalon de Viena es una de las salas de concierto más famosas del mundo. El edificio fue construido entre 1865 y 1867 y cuenta con un estilo renacentista. Aquí se puede disfrutar de obras clásicas como las de Mozart y Strauss junto a una cena. Un buen plan para disfrutar de su pareja en su visita a Austria.
Festival de Salzburgo
Es uno de los festivales más importantes de Austria. Se lleva a cabo desde 1920 en Salzburgo. Se celebra entre los meses de julio y agosto y dura cerca de 40 días. Es un festival de música clásica y barroca en la que tocan gran parte de los compositores del momento.
Un lugar único para los amantes de la música clásica
La Ópera Estatal de Viena se trata de uno teatros más importantes del mundo. Desde su apertura en mayo de 1869, el teatro sigue teniendo vida y tiene actuaciones durante gran parte del año. Austria es un gran lugar para visitar si amas la música clásica y la Ópera Nacional tiene que estar entre una de las visitas obligadas.
Tomar un café y dejar que pase el tiempo
El escritor austriaco Alfred Polgar dijo una vez: “en los cafés vieneses se sienta la gente que quiere estar sola, pero que necesita compañía”. En estos cafés se respira tranquilidad, el tiempo pasa volando y al final lo único que te cobran es el café. Son lugares únicos, reconocidos como centros de vida social e intelectual. Además, la UNESCO los reconoció como Patrimonio de la Humanidad en 2011.
La Escuela Española de Equitación
Con más de 400 años de historia, la Escuela Española de Equitación es una de las instituciones más importantes de Austria. El ver bailar a los caballos lipizzanos, la raza más antigua de Europa, y el espectáculo de doma clásica ha hecho que se convierta en una de las actividades más demandadas por los turistas. Los entrenamientos tienen lugar de martes a sábados de 10 a 12 euros y la entrada tiene un precio de 14 euros.
La Casa de los Huesos
A 300 kilómetros de Viena, en Hallstatt, está la conocida Casa de los Huesos. Es una capilla con un cementerio en la que se encuentran enterrados los habitantes de esta ciudad. Sin embargo, estos son “vigilados” por cráneos humanos de personas que ya han sido exhumadas. Una tradición macabra de las personas que viven aquí, pero una visita recomendable para los amantes de los terrorífico.
Hangar-7
En el aeropuerto de Salzburgo está el famoso Hangar-7, que pertenece a Red Bull, que nació en Austria. En este hangar se exponen los aviones, helicópteros y coches de carreras de todos los eventos que han sido patrocinados por la marca. Como curiosidad, aquí se encuentra el coche de F1 con el que Vettel ganó el Mundial.
Una cena a la austríaca
Entre los meses de abril y octubre, el Ayuntamiento de Viena realiza un espectáculo de cena “a la austríaca”, en el que sirven los principales platos de la gastronomía de Austria. Todo esto mientras la música clásica suena de fondo. Una noche para el recuerdo en Viena, si optas por esta opción.